Este espacio permitirá a la Asociación de Cacaoteros de Valdivia (ASOCAVAL) procesar de manera sostenible hasta 50 toneladas de cacao al año. La construcción contó con el apoyo del programa Hilando Vidas y Esperanza, de USAID e implementado por la OIM; de Fedecacao y EPM.

El pasado 20 de junio, la Asociación de Cacaoteros de Valdivia (ASOCAVAL) inauguró su central de beneficio de cacao en Valdivia, Antioquia. Esta planta podrá procesar hasta 50 toneladas del grano al año y mejorará el aroma, acidez y cuerpo del producto. Todo esto facilitará a ASOCAVAL acceder a los mercados internacionales y a mejores precios.

Según Fedecacao, en la producción cacaotera del país, Antioquia ocupa el tercer lugar, detrás de los departamentos de Santander y Arauca. En Colombia el cacao es sembrado por cerca de 38.000 familias de pequeños productores, cuyos cultivos oscilan entre las dos y diez hectáreas. Valdivia ha sido uno de los municipios del país más afectados por el conflicto armado, la pobreza y las economías ilícitas, por eso hace parte de los Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial (PDET), en la subregión norte de Antioquia. En este municipio el cacao se ha convertido en una oportunidad de generación ingresos alternativa a los cultivos ilícitos.

La construcción de la central de beneficio fue posible gracias a una alianza entre los productores de Asocaval, USAID, OIM, Fedecacao, y Empresas Públicas de Medellín (EPM), que se gestó en el marco del componente de empoderamiento económico del Programa Hilando Vidas y Esperanza (WLH). Como parte del proyecto, la Asociación también participó en un proceso de fortalecimiento organizativo, logrando entre otras cosas, la estructuración y preparación de su plan de negocios; y el desarrollo de los protocolos técnicos para responder a las condiciones ambientales del territorio.

La construcción, además, cuenta con un modelo de agricultura sostenible y sustentable que minimiza el impacto ambiental. Así, por ejemplo, los líquidos residuales generados durante en el beneficio del cacao (conocidos como lixiviados) serán recolectados y reutilizados como abonos orgánicos para los viveros de la organización, contribuyendo además a la fertilidad del suelo.

Estas innovaciones son destacadas por Thea Villate, Gerente de Programa y Especialista en Asistencia al Desarrollo de USAID Colombia, al indicar que “ASOCAVAL es un referente en el país, de cómo la asociatividad contribuye al desarrollo económico integral en la cadena de cacao, generando oportunidades de empleo y comercialización para los pequeños productores”.

Por su parte, Salvador Gutiérrez, director de Programas de Paz de OIM Colombia, indicó que: “Al fortalecer la competitividad del producto, estamos también aumentando las oportunidades y apoyando los esfuerzos de construcción de paz en el territorio, para que las familias y los jóvenes no se vean en la necesidad de desplazarse a otros lugares y puedan aprovechar de manera sostenible la riqueza agrícola antioqueña.”

ASOCAVAL agrupa a 72 familias cacaoteras de Valdivia, que tienen sus cultivos alrededor del río Cauca, y que, desde hace más de diez años, le están apostando al trabajo asociativo y a la introducción de nuevas tecnologías en la agricultura como medios para convertir a los campesinos y campesinas en empresarios del agro. En 2022, participaron en el Chocoshow, la feria nacional de cacao y chocolate más importante del país, logrando importantes alianzas comerciales y ofreciendo al público su línea de chocolatería.

“Hoy se materializa el sueño de cientos de familias cacaoteras del municipio de Valdivia. Nos llena de alegría saber que esto significa que tendremos un cacao de especialidad, con características organolépticas y sensoriales únicas que nos diferenciarán en los mercados nacionales e internacionales”, indicó Elmer Zapata, Representante Legal de Asocaval.

La inauguración incluyó una cata de cacao y un tour por las instalaciones en donde la Asociación presentó los procesos que se desarrollan en la planta. Allí, la comunidad de Valdivia, junto con ASOCAVAL, recibieron a Thea Villate, especialista en Asistencia al Desarrollo y Gerente de Programa de USAID Colombia; a Salvador Gutiérrez, director Programas de Paz de OIM Colombia; Camilo Leguízamo, coordinador del Programa Hilando Vidas de OIM Colombia; Eduard Baquero, presidente de Fedecacao; y a María del Campo, rostro comercial de Fedecacao.

Acerca del Programa Hilando Vidas y Esperanza

Este programa busca mejorar la salud mental y el bienestar integral de los sobrevivientes del conflicto armado y de las comunidades históricamente afectadas por la violencia en diferentes zonas del país, entre ellas el Bajo Cauca, Norte y Nordeste Antioqueño. Esta iniciativa de USAID, implementada por OIM, desarrolla estrategias para empoderar económicamente a estas comunidades como agentes de cambio en su territorio, y mejorar su calidad de vida en armonía con el medio ambiente.